Las úlceras de estómago del caballo tienen tratamientos muy concretos y efectivos, pero si no realizas cambios en el manejo de la alimentación y de la estabulación de tu caballo, es muy probable que vuelva a recaer.
La mejor manera de evitarlas es la prevención, por eso, en el blog de Pavo hablaremos del origen de las úlceras gástricas del caballo, de cómo se producen y cómo prevenirlas.
¿Cómo se producen las úlceras?
El estómago tiene dos tipos de mucosas que lo protegen internamente. En la parte inferior la mucosa es más fuerte, ya que es en la zona inferior donde se produce el ácido del estómago y por tanto está más preparada para soportarlo. La zona superior está recubierta por una mucosa más delicada.
El ácido es necesario para comenzar la digestión de los alimentos y para eliminar gérmenes nocivos. En el caballo este ácido se produce de forma continua, independientemente de que el caballo coma o no. El caballo es un comedor continuo, siempre está pastando. Esa masticación produce saliva que actúa de tampón de los ácidos del estómago, de modo que el pH del estómago es el idóneo para la digestión. El problema aparece cuando el caballo en lugar de comer continuamente pasa periodos sin comida en el estómago. La producción de saliva en el caballo depende de la masticación. Si el caballo no mastica, no hay saliva. Y aquí empieza el problema. Sin saliva el ácido del estómago comienza a atacar la mucosa, primero inflamándola y, si el problema persiste llega a destruirla y formar auténticas llagas.
Esto comienza a producirse cuando el caballo pasa más de 4 horas sin comida en el estómago. Y esa es la explicación de por qué el 60% de los caballos tienen úlceras.
La explicación de por qué no nos enteramos es que los caballos ocultan el dolor como medio de supervivencia heredado de los ancestros en libertad, ya que aquellos caballos que mostraban problemas eran los que los depredadores preferían atacar.
Síntomas de las úlceras gástricas en los caballos
Los síntomas suelen ser mínimos y esto es uno de los mayores peligros, ya que cuando se manifiestan, el daño ya es muy intenso. Por eso, para un diagnóstico precoz se necesita realizar una endoscopia.
Agradecemos a la Dra. Marta González del Hospital Veterinario Sierra de Madrid
la cesión de esta vídeo-endoscopia gástrica en la que se observan úlceras.
El caballo se ha adaptado a no manifestar dolor de modo evidente como medio de supervivencia, lo cual no quiere decir que no lo padezca.
Un animal con úlceras puede volverse reacio a trabajar. Consideramos que es un animal vago, cuando en realidad padece, en silencio, un gran dolor.
Protesta al cincharlo.
Otras veces, se vuelven malos comedores porque tras la ingesta de alimento aumenta su dolor y dejan de comer repentinamente.
Son animales en los que el pelaje empeora y que adelgazan.
Pueden presentar heces blandas intermitentes y cólicos de baja intensidad, también intermitentes.
Si las úlceras se agravan, los cólicos pasan a intensos y las heces blandas se convierten en diarreas.
Otros síntomas son rechinar de dientes, bostezar, o el reflejo de Flehmen en frecuencia mayor a la normal.
Los potros lactantes también padecen úlceras de estómago y cuando ya manifiestan síntomas, la ulceración está muy avanzada.
Úlceras gastricas en la pared del estómago de un caballo
¿Por qué el caballo es tan sensible a padecer úlceras de estómago?
Para entender esto tendremos que recapitular en la evolución del caballo y la adaptación que se produce en su organismo ante un determinado entorno.
Los antepasados de nuestros caballos vivían pastando continuamente
Eran herbívoros que vivían en amplias extensiones de terreno, ya que para satisfacer sus necesidades energéticas necesitaban pastar durante todo el día de modo continuo. Comían entre 15 a 18 horas al día en pequeñas cantidades.
El organismo se adapta a esta situación secretando jugos gástricos de modo constante. Comer continuamente significa masticar y producir saliva en todo momento. Esta saliva, además, neutraliza los ácidos de los jugos gástricos.
Un comedor continuo no necesita un estómago grande ya que va introduciendo pequeñas cantidades que avanzan progresivamente hacia el intestino delgado.
Estos animales pastaban en manada, eran animales gregarios con sus jerarquías y roles. La manada es protección y disminuye el estrés.
Pastar supone también caminar largas distancias, lo que favorecen el tránsito intestinal..
Situación actual de un caballo estabulado
Permanecen confinados en un box casi veintitrés horas al día.
Reciben toda su ración diaria concentrada en dos o tres comidas, a pesar de tener un estómago muy pequeño.
Están aislados de otros congéneres, algunos solo por paredes, otros por kilómetros de distancia.
Lo que no ha cambiado es que siguen secretando jugos gástricos de modo continuo. En cuanto pasan unas pocas horas con el estómago vacío, comienza la erosión del ácido clorhídrico en la delicada mucosa del estómago. Los ácidos ni siquiera son neutralizados por la saliva pues sin masticación, su producción es muy baja.
7 puntos para prevenir las úlceras gástricas
1. Aumenta el tiempo de permanencia en el pasto al mayor posible
Si es todo el día, mejor. Pastará de continuo, masticará y salivará, a la vez se moverá mucho más que en el box y facilitará el tránsito intestinal.
2. Disminuye, en lo posible, el uso de cereales o piensos con alto contenido en almidón, y aumenta la frecuencia de tomas
Si le estabas dando el pienso dos veces al día, cambia a tres veces al día o incluso cuatro.
Puedes trocear heno y ponerlo mezclado con el pienso para ralentizar la ingesta y favorecer la masticación y la salivación, aunque es muy trabajoso. En Pavo tenemos Pavo DailyPlus, un producto ya preparado para mezclar directamente con el pienso, sabroso y equilibrado, que aumenta el tiempo de masticación hasta tres veces más.
Si por la baja actividad de tu caballo, puedes disminuir el consumo de pienso hasta nulo o muy poco, debes usar equilibradores para garantizar el suficiente aporte de vitaminas, minerales y oligoelementos. Para que te hagas una idea, si un caballo de 600 kg consume menos de 1,5 kg de pienso al día, debes suministrarle un equilibrador.
Si, por el contrario, tienes un caballo en trabajo medio alto que tiene grandes necesidades energéticas, debes de suministrar un pienso de nivel energético 3 estrellas y que a su vez sea altamente digestible y tenga un efecto neutralizador de la acidez gástrica, como Pavo Ease&Excel.
El transporte, los concursos, tener sementales cerca o tener en boxes contiguos animales que se llevan mal, son algunas de las situaciones estresantes que debes de reducir en lo posible. Cuando no se puedan evitar esos estresores, añade Pavo GastriCover a la ración diaria para una ayuda extra a la mucosa.
4. Aumenta la proporción de forraje en la dieta y suminístralo antes que el pienso
Debe de ser de buena calidad y disponer de él durante todo el día. Puedes usar para ello redes o comederos para alimentación lenta.
Ten cuidado al colgar las redes para heno. Cuando están llenas parecen quedar a buena altura, pero a medida que comen el heno se van estirando, y si quedan bajas, pueden ser un riesgo, ya que pueden meter las extremidades en ellas. Asegúrate de que la altura es suficiente para evitarlo.
5. Suministra un apoyo extra en el caso de uso de ciertos medicamentos
Algunos medicamentos como los antiinflamatorios o los analgésicos (entre otros) pueden afectar a la mucosa gástrica acelerando su daño. Pregunta tu veterinario respecto a este problema y, si es así, puedes proporcionar Pavo GastriCover, un suplemento que neutraliza el exceso de ácido, ayudando a la conservación de una mucosa gástrica sana.
6. Suministra un poco de forraje antes de entrenar
El trabajo hace que el estómago se contraiga más, porque el cuerpo está en "modo de escape". Como resultado, el contenido ácido de la parte inferior del estómago entra en mayor contacto con la parte superior menos protegida. Esto es especialmente negativo cuando se trabaja con el estómago vacío. Además de que no existe saliva para neutralizar el ácido, no hay nada que actúe como "amortiguador" de las ondas que se producen por el movimiento, y el jugo gástrico (no neutralizado por la saliva) frecuentemente salpica contra la pared superior desprotegida del estómago. Esto puede acelerar el desarrollo de úlceras gástricas conocidas como úlceras por salpicadura.
Por lo tanto, antes del entrenamiento, es mejor alimentar al caballo con un poco de forraje y no se recomienda darle concentrado dos horas antes del entrenamiento.
7. Favorece la socialización con otros caballos
Abre las ventanas superiores de la puerta del box y que los caballos se vean, o incluso se toquen entre ellos. Introduce a varios animales que se lleven bien en el mismo prado. Permite que los caballos se hermanen.
Como ves, todos los consejos nos orientan (en la medida de lo posible) hacia un manejo más natural de un animal de manada en un campo y en libertad, sin los inconvenientes de los depredadores y las penurias de la mala climatología o el poco alimento. ¿Se puede ser más feliz?
Si quieres saber más sobre este tema, escucha el programa que temos sobre úlceras en nuestro podcast.
Si te ha resultado interesante, ayúdanos a difundir este artículo sobre las úlceras de estómago en el caballo.
No te quedes con dudas. Utiliza la sección de comentarios para plantearlas y responderemos a tus preguntas.
¿Te gusta el blog de Pavo?
¡Suscríbite al blog!
Te avisaremos cada vez que publiquemos nuevo contenido
Las defensas son esas amigas responsables de la salud de hierro de algunos caballos, que parecen tener un origen inexplicable, pero que en realidad podemos moldear más de lo que pensamos.
En... Leer más >
Para comenzar, debemos de decir que por mucho que estemos preparados para rehidratar al caballo, si no está preparado físicamente para esa ruta, no debemos realizarla. Por lo tanto, todos... Leer más >